Una de las tendencias que no ha pasado desapercibida en los últimos años es el diseño y construcción de piscinas naturales, siendo cada día uno de los servicios más demandado por los clientes gracias a su ecosistema natural y ecológico.
Las piscinas naturales, también conocidas como piscinas ecológicas o biopiscinas, destacan por su sistema de depuración natural en lugar de utilizar productos químicos, su fácil adaptación al entorno y el ahorro de energía.
¿Por qué construir una piscina natural en nuestro jardín?
Las piscinas naturales dan un toque de distinción a nuestro jardín. A pesar de que, a día de hoy, son pocos los jardines privados que cuentan con una biopiscina, cada día son más las personas interesadas en integrar esta obra de arte en sus residencias.
Plena integración en el jardín
Este tipo de piscinas se integran perfectamente en el entorno, de la forma deseada y adaptada a la forma del terreno. El objetivo es diseñar un espacio que recuerde a un entorno natural, como un río o lago. Sin embargo, también se pueden diseñar con un aspecto más similar a las piscinas convencionales pero con los beneficios de las biopiscinas, con un estilo más minimista y rodeado, por ejemplo, de un suelo de madera o cemento pulido.
Uso de sistema de depuración natural
Las piscinas naturales o ecológicas, además de no emplear productos químicos, requieren de un menor mantenimiento y un menor consumo energético en la depuración.
Este tipo de piscinas depuran y purifican el agua de una forma natural gracias a la integración de plantas acuáticas, gravas y microorganismos, que actúan como alternativa al cloro pero de manera más respetuosa con el medio ambiente.
Ausencia de aditivos químicos
Otra ventaja excelente, sobretodo para aquellas personas que sufren alergias e irritaciones, es que elimina el riesgo de reacciones alérgicas a cloros y otros agentes químicos. Tampoco hay que estar cambiando constantemente el agua, en general ofrecen un mantenimiento bajo.
Mantenimiento de una piscina natural
Como cualquier otra piscina, requiere de unos cuidados mínimos. En los meses de primavera y otoño no es necesario un gran mantenimiento más allá de lo básico. En invierno es imprescindible estar pendiente de que el mal tiempo no afecte a las plantas, así como también aprovechar para podarlas. Además, es importante saber que no se debe cubrir ya que las plantas son seres vivos que deben estar libertad. En verano, cuando más se va a disfrutar, lo recomendable es hacer tareas una vez a la semana por el continuo uso.
Con hacer una limpieza en profundidad al año es suficiente, preferiblemente en primavera, para que la piscina esté perfecta para la llegada del buen tiempo.
Constante cambio en tu jardín
Al tratarse de un conjunto de vegetación cambia igual que la naturaleza con las estaciones del año. En primavera brotan las flores y hojas y se aletargan en otoño e invierno. Si finalmente decides crear un piscina natural en tu jardín, no solo podrás disfrutar de un baño agradable en verano sino también de un espacio donde poder experimentar los cambios de las cuatro estaciones del año.
En Xardín Senra contamos con un equipo de profesionales especializados en el diseño y construcción de piscinas naturales que están preparados para proyectar la piscina de tus sueños. Ahora sólo queda que nos plantees tu idea, y nuestro equipo estará encantado de hacerlo realidad.